La Galería Manolo Alés concentra esta semana las acciones del proyecto ‘Una idea de paisaje’, comisariado por el artista linense, Juan Carlos Bracho, a través de la delegación municipal de Cultura.Desde el pasado lunes se está desarrollando, ‘Apología de John Graham’ con el Laboratorio inestable del Mohín y un grupo de residentes del Centro de Atención Integral al Mayor “Maria Luisa Escribano”, del Grupo Asansull. En la Galería Municipal Manolo Alés, recrean un espacio a modo de ágora o plaza pública donde reunirse simplemente para hablar, para recordar, para contar historias personales y colectivas. A través de la palabra contada o escrita -y de los cuerpos que las proyectan- juntos trabajarán en una suerte de performance o pieza teatral a partir de sus recuerdos, de lo real, de lo imaginado, de lo recreado, de lo inventado, de lo olvidado, de lo que desapareció y de lo que estar por venir.
La idea y puesta en escena son de Ahmed Benattia y María Moncada, artífices del Laboratorio Inestable del Mohín, entidad que tiene como estudio la construcción de la identidad del sujeto,sus referencias materiales y culturales, sus relaciones con el resto de subjetividades y de colectividades, cómo reflexiona sobre sí mismo (desde que perspectiva y con qué herramientas), y qué “futuros” proyecta.
Interpretan ‘Apología de John Graham’, María Gómez, Graeme Shepherd y María Moncada. Al tratarse de una obra viva, cuyo resultado final dependerá del propio devenir de la actividad, “la obra” se formalizará durante el propio proceso entre la residencia de mayores, la Galería Municipal Manolo Alés y el Salón de Actos de La Casa de La Cultura, y su presentación y activación será una performance en directo, este viernes, 29 de abril, a las 20.30 horas.
También el viernes, 29 de abril, a las 20.00 horas, Una Idea de Paisaje rendirá homenaje a Miguel Guerrero. La Galería Manolo Alés mostrará una parte de los fondos documentales del que fue el Cinematógrafo, un espacio cultural de referencia para el Campo de Gibraltar que Guerrero fundó junto a unos amigos en 1984 y dirigió hasta 2005, con proyecciones en el salón de actos de la Casa de la Cultura. Después de abandonar su sede, se volvió un proyecto en el “exilio”, y ahora su trabajo vuelve a las vitrinas de la Galería, a través de carteles, revistas, fichas manuscritas y recuerdos de los más de veinte años de dedicación y entrega a la cultura.
Miguel Guerrero (La Línea 1958, 2021) fue ante todo un agitador y activista cultural, que destacó como escritor y gestor. Su trayectoria ha estado vinculada desde siempre al mundo de las letras, el cine y especialmente, al edificio de la Casa de la Cultura, lugar donde puso en marcha el Cineclub, y donde trabajó para la delegación municipal de Cultura. Cofundador de las revistas literarias ‘eLm Street’ y ‘Así, Roithamer’, su última novela, publicada en 2018, “Pajaro Funebre”, se desarrolla en un paisaje distópico de una ciudad imaginaria.
