A las 08.25 horas del domingo, 21 de febrero, dos policías locales que intervenían en un accidente de tráfico en la calle Gibraltar fueron requeridos por una persona que les informó de que en la calle Barcelona un joven, al que describió minuciosamente, estaba forzando una cabina de teléfonos ayudándose de una barra.

Al llegar al lugar comprobaron que, efectivamente, dicha cabina de teléfonos había sido asaltada. Los agentes realizaron una batida por la zona hasta descubrir a un varón, con las características descritas por el testigo, que manipulaba la cabina de teléfonos situada en la calle Ronda. Al verse sorprendido, el joven huyó, siendo seguido por los policías locales que pudieron alcanzarle cerca de su domicilio.

En ese instante procedieron a su detención, a la que ofreció una gran resistencia, y al forcejear con uno de los agentes, le propinó un codazo en la boca que le fracturó una pieza dental. Durante el forcejeo, apareció el padre del joven amenazando con una barra de hierro a los policías. Al intentar detenerlo, el hombre entró en su domicilio y a requerimiento de los agentes se identificó verbalmente.
La operación concluyó con la detención del joven por la presunta comisión de un delito de robo con fuerza. Los policías locales fueron asistidos médicamente de varias erosiones en muñeca y rodillas, además de la fractura de un diente. Tras el correspondiente parte facultativo, el detenido fue traslado a la comisaría donde se instruyeron las oportunas diligencias.